Comenzando el viaje
¿Qué es el Barómetro de la Restauración?
Establecer una visión
Sentando las bases para la restauración
Comenzando el viaje
¿Qué es el Barómetro de la Restauración?
El Barómetro de la Restauración de la UICN es la única plataforma operativa que ya es usada por gobiernos para hacer seguimiento al avance de sus objetivos de restauración. Actualmente la usan 22 gobiernos, está respaldada por más de 50 y ha sido utilizada anteriormente por países como los Estados Unidos y Brasil. Los datos de más de una docena de países se añadirán a principios del 2023 y también serán utilizada de manera experimental por 34 compañías.
El término “restauración” se refiere a la restauración de ecosistemas, que es el proceso de recuperar ecosistemas que han resultado dañados, degradados o destruidos. Cuando se hace adecuadamente, la restauración puede incrementar la biodiversidad, mejorar la calidad de vida, potenciar la seguridad alimentaria, incrementar la disponibilidad de agua y ayudar a mitigar el cambio climático, entre muchos otros beneficios.
Muchos países implementan la restauración como parte de sus compromisos con objetivos o tratados internacionales, como el Desafío de Bonn, el Marco Mundial para la Biodiversidad, el Acuerdo de París y otros. Al enviar datos al Barómetro, los países pueden hacer seguimiento al avance en sus objetivos de restauración de manera sencilla y fluida.
22 países* que envían sus datos de restauración.
22
8 tipos de ecosistemas en restauración.
8
>14 millones de hectáreas de terreno en restauración.
>14
“La restauración es un proceso continuo. Hemos desarrollado el Barómetro de la Restauración para facultar a nuestros países asociados a escribir sus propios capítulos en esa historia. En esta década clave para la restauración, el Barómetro ayuda a aquellos que se dedican a recuperar los ecosistemas a demostrar los beneficios de su labor y garantizarse los muy necesarios recursos para la implementación.”
— Carole Saint-Laurent, directora del Equipo para Bosques y Pastizales del Centro para Acciones de Conservación del UICN.
Establecer una visión
Sentando las bases para la restauración
Los entornos no se pueden restaurar de la noche a la mañana. La restauración es un proceso a largo plazo, y tiene un aspecto diferente en cada país dependiendo de las necesidades de sus ecosistemas, ambientes y sociedades específicos.
Esto implica que cada país debe planificar cuidadosamente cómo transformar sus objetivos de restauración en impactos reales. Para lograrlo, es necesario establecer ciertos elementos básicos, como políticas bien diseñadas, una planificación técnica concienzuda, flujos de financiación continuos y sólidos sistemas de monitoreo.
Establecer estos elementos básicos contribuye con la sostenibilidad de las iniciativas de recuperación de los países y sienta las bases para generar la mayor cantidad posible de beneficios con el tiempo.
POLÍTICAS
Establecer políticas es una parte clave del Viaje a la Restauración. Los países pueden desarrollar políticas y otros acuerdos institucionales que operativicen sus planes de restauración y ayuden a fomentar las acciones directas in situ. Estos pueden incluir, por ejemplo, establecer cronogramas, determinar esquemas de incentivos, definir objetivos específicos y diseñar el enfoque para lograr estos objetivos.
Este proceso es crucial, no solo porque define los objetivos de la restauración y cómo se pueden lograr, sino también porque faculta a las agencias gubernamentales y a sus asociados para convertir los compromisos en verdaderas acciones de restauración.
La estrategia de gestión de manglares en Mozambique: un caso de estudio de políticas
PLANIFICACIÓN
Para hacer realidad la restauración alimentaria, es necesario que los gobiernos suministren ciertas herramientas y estructuras. Antes de que esto pueda ocurrir, es necesario que haya una planificación eficaz para identificar dónde, por qué y cómo se implementarán las iniciativas de restauración.
Esto garantiza que se involucren las personas adecuadas, se enfoquen a los ecosistemas correctos y que exista la capacidad de recuperación necesaria, sentando así las bases para lograr un verdadero impacto.
Planificación de la restauración en Centroamérica: un caso de estudio de planificación
Centroamérica alberga al 12 % de la biodiversidad total de la tierra, tanto en flora como en fauna. Sin embargo, a causa de factores como la tala, la actividad ganadera y la expansión urbana, buena cantidad de los bosques de la región (5.180 kilómetros cuadrados) se han perdido en menos de una década.
Llevarlo a la práctica
Sentando las bases para la restauración
Llevarlo a la práctica
Sentando las bases para la restauración
Después de establecer una visión, es necesario implementar planes de restauración para garantizar que los objetivos se cumplan. La restauración tiene aspectos diferentes para cada país y ecosistema. Desde la plantación de manglares y la protección de las costas, hasta la reintroducción de especies nativas en humedales y turberas, los esfuerzos de restauración dan fruto cuando las personas que están in situ ─que están dedicadas a la restauración─ ejecutan los planes.
MONITOREO
La implementación de la restauración no es el fin del camino; también es importante que los programas de restauración se monitoreen eficazmente. Mediante la recopilación de datos sobre las iniciativas de recuperación a lo largo del tiempo, es posible hacerse una imagen de si están ocurriendo avances positivos. Además de los datos seguimiento, como la cantidad de árboles o manglares plantados, corredores de biodiversidad creados o especies nativas reintroducidas, las herramientas de monitoreo también pueden demostrar la implicación de las comunidades en los proyectos de restauración.
Cartografía de bosques en Kazajstán: un caso de estudio de monitoreo
Kazajstán alberga una de las mayores superficies boscosas de las regiones europea y centroasiática, a pesar de que solo constituyen un 5 % de la superficie del país. Sin embargo, los bosques siguen amenazados por los efectos relacionados con el cambio climático, como las sequías; y las actividades humanas, como la construcción de carreteras, mal manejo de los recursos e industrias contaminantes.
Para atajar estas amenazas y preservar los bosques para las generaciones futuras, el gobierno está implementando planes de restauración de bosques a nivel nacional, con el objetivo de restaurar 1,5 millones de hectáreas y plantar 2.000 millones de árboles para el 2030.
Mediante un plan nacional de siembra y plantación, así como de regeneración natural de especies individuales de árboles, hay actualmente más de 575.000 hectáreas de tierras en restauración en todo el país. Grupos de trabajadores estacionales de poblaciones locales (rurales en su mayoría), se implican en estos proyectos, plantando árboles y semillas en viveros forestales.
Si bien la implementación de actividades de restauración está en marcha, es crucial monitorear los avances para comprender qué está funcionando y dónde hay que imprimir esfuerzos adicionales. En Kazajstán, el gobierno ha creado un mapa interactivo para la plantación de dos mil millones de árboles, que muestra información tal como el área sembrada o plantada, las especies de árboles, la cantidad de árboles y también planes detallados para cada etapa. Las imágenes de resolución espacial del país entero se actualizan cada mes, lo que permite crear una imagen exhaustivamente detallada de las iniciativas de recuperación del país.
Monitorear la implementación de actividades de restauración es un paso importante en lograr que la restauración ocurra realmente, y ayuda a garantizar su éxito a largo plazo.
Reconstrucción de nuestros ecosistemas
Creando impactos
Reconstrucción de nuestros ecosistemas
Creando impactos
Una vez sentadas las bases para la restauración, los ecosistemas pueden comenzar a recuperarse y el impacto de las iniciativas comienza a volverse visible. Sin embargo, para ver un impacto real y sostenible, es crucial que la restauración ocurra en todos los ecosistemas.
El Barómetro de la Restauración abarca a todos los tipos de ecosistemas terrestres, incluyendo entornos costeros y aguas continentales, en los que los derechos de uso o gestión se pueden identificar. Actualmente, los usuarios del Barómetro de la Restauración pueden presentar informes en ocho tipos de ecosistemas…
Haz clic en los ecosistemas para descubrir qué son y cómo se han ido restaurando hasta ahora…
Desiertos y semiáridos:
Los desiertos y semiáridos son entornos con muy pocas precipitaciones, lo que crea condiciones que suelen ser hostiles a la vida animal y vegetal. Estas condiciones hostiles se recrudecen a causa de los efectos del cambio climático, que amenaza la vida nativa de esas regiones.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- El mejoramiento del acceso al agua para la vida silvestre nativa .
- Regeneración natural (por ejemplo, gestión de la vegetación y el pastoreo, reintroducción de especies nativas).
- Regeneración artificial (por ejemplo, plantación/siembra, construcción de terrazas, intervenciones orientadas a la gestión o recolección de agua).
- Protección de tierras y aguas (por ejemplo, protección de hábitats).
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
El 8 % de los países que reportan al Barómetro en 2022 están restaurando este tipo de ecosistema en 1.554.134 hectáreas.
Tierras cultivables y áreas de uso mixto
Las tierras cultivables típicamente se usan para la agroindustria, incluyendo la cría de ganado y los cultivos para consumo humano y animal. Sin embargo, las prácticas agrarias intensivas suelen afectar negativamente a la calidad del terreno, causando contaminación en los cursos de agua, agotando los suelos y mermando la biodiversidad.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Mejoramiento de la gestión de las tierras (por ejemplo, agrosilvicultura y agricultura orgánica).
- Regeneración artificial (por ejemplo, rotación de cultivos y sistemas integrados de gestión de estiércol).
- Regeneración natural asistida (por ejemplo, creación de hábitats y control de plagas).
- Entornos de cultivo (por ejemplo, gestión de parcelas arboladas y restauración de zonas ribereñas)
El 17 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 2.688.314 hectáreas.
Bosques y zonas forestales:
Los bosques y zonas forestales son áreas de tierra predominantemente cubiertas por árboles y vida vegetal. También alojan a una enorme cantidad de especies. Sin embargo, estos ecosistemas están amenazados por la deforestación para actividades como la agricultura y la minería, así como a eventos meteorológicos extremos tales como los incendios, que se están volviendo cada vez más frecuentes a causa del cambio climático. La deforestación altera el equilibrio de las plantas y la vida salvaje dentro de estos ecosistemas y debilita las funciones naturales, tales como las de purificación de aguas y salud de los suelos.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Acciones de protección/conservación de aguas y suelos (por ejemplo, protección de hábitats, plantación y siembra y reintroducción de vida silvestre).
- Regeneración natural (por ejemplo, reducción o eliminación de fuentes de degradación, restauración de los regímenes naturales de inundaciones y mejoramiento de los suelos).
- Silvicultura (por ejemplo, reemplazo de especies no nativas por especies nativas, conservación de árboles heredados y tala selectiva).
- Protección de cuencas y control de la erosión.
- Control de especies invasivas o problemática.
El 28 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 8.785.373 hectáreas.
Turberas
Las turberas son entornos naturales que constan principalmente de pantanos de turba. La turba es una capa orgánica de suelo hecha de vegetación en descomposición y otros tipos de materia orgánica, que puede acumular enormes cantidades tanto de dióxido de carbono como de agua. Sin embargo, el aumento de las temperaturas a causa del cambio climático puede evitar que la turba se mantenga lo suficientemente húmeda, lo que resulta problemático porque la turba seca libera grandes cantidades de carbono a la atmósfera.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- La regeneración natural (es decir, la eliminación de vegetación terrestre no nativa o de vegetación nativa que haya crecido en exceso).
- Regeneración artificial (por ejemplo, gestión de recogida de aguas y prevención de la minería ilegal).
- Protección de tierras y aguas.
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
El 3 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 2.105 hectáreas.
Pastizales, matorrales y sabanas:
Los pastizales, matorrales y sabanas típicamente presentan climas áridos o semiáridos y abarcan una enorme extensión de la superficie de la tierra. Estos parajes albergan vegetación y suelos que pueden capturar y almacenar dióxido de carbono, así como a una gran diversidad de especies, muchas de las cuales están en peligro de extinción. Muchos de estos ecosistemas también se encuentran en peligro por el cambio climático, debido al aumento de las temperaturas y a los fenómenos meteorológicos impredecibles.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Regeneración natural (por ejemplo, siembra de nubes y reactivación de los desplazamientos de manadas).
- Regeneración artificial (por ejemplo, plantación de matorrales y mejora de suelos).
- Protección de tierras y aguas (por ejemplo, protección de hábitats y rehabilitación de corredores).
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
- Implementación de sistemas de gestión participativa y usuarios locales de tierras.
El 10 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 793.693 hectáreas.
Costas y manglares
Las costas son entornos naturales ubicados en donde la tierra se encuentra con el mar. En algunos lugares costeros, se dan los bosques de manglares. Los manglares son arbustos o árboles únicos, cuyas raíces suelen estar sobre la superficie tanto del agua como del suelo, y que crecen en las costas. Los manglares almacenan carbono, y también presentan muchos otros beneficios para la biodiversidad. Sin embargo, debido al cambio climático y a la actividad humana, su población ha disminuido significativamente durante las últimas décadas.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Regeneración natural
- Regeneración artificial
- Restauración hidrológica (por ejemplo, eliminar represas y desatascar bloqueos de canales)
- Preparación de la zona
- Mejoramiento de la calidad del agua superficial (praderas marinas)
- Cercas artificiales para evitar la erosión y la pérdida de arenas
- Protección de tierras y aguas
El 15 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 98.373 hectáreas.
Ríos, arroyos y lagos (humedales)
Comunes en todas las regiones del planeta y en diversos climas, los humedales son entornos naturales donde el suelo está saturado de agua. Estos ecosistemas se caracterizan por no estar ni totalmente bajo el agua, ni ser totalmente secos.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Regeneración natural (por ejemplo, reintroducción de especies nativas y eliminación de vegetación terrestre no nativa).
- Regeneración artificial (por ejemplo, eliminación de represas sin usar y prevención de la minería ilegal).
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
- Protección de tierras y aguas.
El 13 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 128.903 hectáreas.
Áreas urbanas
Las áreas urbanas son entornos mayormente artificiales que presentan una gran cantidad de estructuras humanas como edificios, carreteras y puentes. El desarrollo de estas áreas suele venir acompañado de una pérdida significativa de vegetación y fauna, a menos que se hagan planes para evitar esto o reintroducir las plantas y animales en otros lugares del espacio urbano.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Conversión de infraestructuras grises en verdes.
- Restauración de cursos de agua urbanos.
- Creación de espacios azules / reservorios de agua seminaturales.
- Mejoramiento de la calidad del aire.
- Creación de hábitats para especies nativas.
- Creación de techos verdes.
- Desarrollo de sistemas de alimentos periurbanos.
El 5 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 189.525 hectáreas.
Desiertos y semiáridos:
Los desiertos y semiáridos son entornos con muy pocas precipitaciones, lo que crea condiciones que suelen ser hostiles a la vida animal y vegetal. Estas condiciones hostiles se recrudecen a causa de los efectos del cambio climático, que amenaza la vida nativa de esas regiones.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- El mejoramiento del acceso al agua para la vida silvestre nativa .
- Regeneración natural (por ejemplo, gestión de la vegetación y el pastoreo, reintroducción de especies nativas).
- Regeneración artificial (por ejemplo, plantación/siembra, construcción de terrazas, intervenciones orientadas a la gestión o recolección de agua).
- Protección de tierras y aguas (por ejemplo, protección de hábitats).
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
El 8 % de los países que reportan al Barómetro en 2022 están restaurando este tipo de ecosistema en 1.554.134 hectáreas.
Tierras cultivables y áreas de uso mixto
Las tierras cultivables típicamente se usan para la agroindustria, incluyendo la cría de ganado y los cultivos para consumo humano y animal. Sin embargo, las prácticas agrarias intensivas suelen afectar negativamente a la calidad del terreno, causando contaminación en los cursos de agua, agotando los suelos y mermando la biodiversidad.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Mejoramiento de la gestión de las tierras (por ejemplo, agrosilvicultura y agricultura orgánica).
- Regeneración artificial (por ejemplo, rotación de cultivos y sistemas integrados de gestión de estiércol).
- Regeneración natural asistida (por ejemplo, creación de hábitats y control de plagas).
- Entornos de cultivo (por ejemplo, gestión de parcelas arboladas y restauración de zonas ribereñas)
El 17 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 2.688.314 hectáreas.
Bosques y zonas forestales:
Los bosques y zonas forestales son áreas de tierra predominantemente cubiertas por árboles y vida vegetal. También alojan a una enorme cantidad de especies. Sin embargo, estos ecosistemas están amenazados por la deforestación para actividades como la agricultura y la minería, así como a eventos meteorológicos extremos tales como los incendios, que se están volviendo cada vez más frecuentes a causa del cambio climático. La deforestación altera el equilibrio de las plantas y la vida salvaje dentro de estos ecosistemas y debilita las funciones naturales, tales como las de purificación de aguas y salud de los suelos.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Acciones de protección/conservación de aguas y suelos (por ejemplo, protección de hábitats, plantación y siembra y reintroducción de vida silvestre).
- Regeneración natural (por ejemplo, reducción o eliminación de fuentes de degradación, restauración de los regímenes naturales de inundaciones y mejoramiento de los suelos).
- Silvicultura (por ejemplo, reemplazo de especies no nativas por especies nativas, conservación de árboles heredados y tala selectiva).
- Protección de cuencas y control de la erosión.
- Control de especies invasivas o problemática.
El 28 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 8.785.373 hectáreas.
Turberas
Las turberas son entornos naturales que constan principalmente de pantanos de turba. La turba es una capa orgánica de suelo hecha de vegetación en descomposición y otros tipos de materia orgánica, que puede acumular enormes cantidades tanto de dióxido de carbono como de agua. Sin embargo, el aumento de las temperaturas a causa del cambio climático puede evitar que la turba se mantenga lo suficientemente húmeda, lo que resulta problemático porque la turba seca libera grandes cantidades de carbono a la atmósfera.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- La regeneración natural (es decir, la eliminación de vegetación terrestre no nativa o de vegetación nativa que haya crecido en exceso).
- Regeneración artificial (por ejemplo, gestión de recogida de aguas y prevención de la minería ilegal).
- Protección de tierras y aguas.
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
El 3 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 2.105 hectáreas.
Pastizales, matorrales y sabanas:
Los pastizales, matorrales y sabanas típicamente presentan climas áridos o semiáridos y abarcan una enorme extensión de la superficie de la tierra. Estos parajes albergan vegetación y suelos que pueden capturar y almacenar dióxido de carbono, así como a una gran diversidad de especies, muchas de las cuales están en peligro de extinción. Muchos de estos ecosistemas también se encuentran en peligro por el cambio climático, debido al aumento de las temperaturas y a los fenómenos meteorológicos impredecibles.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Regeneración natural (por ejemplo, siembra de nubes y reactivación de los desplazamientos de manadas).
- Regeneración artificial (por ejemplo, plantación de matorrales y mejora de suelos).
- Protección de tierras y aguas (por ejemplo, protección de hábitats y rehabilitación de corredores).
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
- Implementación de sistemas de gestión participativa y usuarios locales de tierras.
El 10 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 793.693 hectáreas.
Costas y manglares
Las costas son entornos naturales ubicados en donde la tierra se encuentra con el mar. En algunos lugares costeros, se dan los bosques de manglares. Los manglares son arbustos o árboles únicos, cuyas raíces suelen estar sobre la superficie tanto del agua como del suelo, y que crecen en las costas. Los manglares almacenan carbono, y también presentan muchos otros beneficios para la biodiversidad. Sin embargo, debido al cambio climático y a la actividad humana, su población ha disminuido significativamente durante las últimas décadas.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Regeneración natural
- Regeneración artificial
- Restauración hidrológica (por ejemplo, eliminar represas y desatascar bloqueos de canales)
- Preparación de la zona
- Mejoramiento de la calidad del agua superficial (praderas marinas)
- Cercas artificiales para evitar la erosión y la pérdida de arenas
- Protección de tierras y aguas
El 15 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 98.373 hectáreas.
Ríos, arroyos y lagos (humedales)
Comunes en todas las regiones del planeta y en diversos climas, los humedales son entornos naturales donde el suelo está saturado de agua. Estos ecosistemas se caracterizan por no estar ni totalmente bajo el agua, ni ser totalmente secos.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Regeneración natural (por ejemplo, reintroducción de especies nativas y eliminación de vegetación terrestre no nativa).
- Regeneración artificial (por ejemplo, eliminación de represas sin usar y prevención de la minería ilegal).
- Control de especies invasivas o problemáticas.
- Gestión de especies nativas invasivas (incluyendo enfermedades).
- Protección de tierras y aguas.
El 13 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 128.903 hectáreas.
Áreas urbanas
Las áreas urbanas son entornos mayormente artificiales que presentan una gran cantidad de estructuras humanas como edificios, carreteras y puentes. El desarrollo de estas áreas suele venir acompañado de una pérdida significativa de vegetación y fauna, a menos que se hagan planes para evitar esto o reintroducir las plantas y animales en otros lugares del espacio urbano.
Estos ecosistemas se pueden restaurar mediante:
- Conversión de infraestructuras grises en verdes.
- Restauración de cursos de agua urbanos.
- Creación de espacios azules / reservorios de agua seminaturales.
- Mejoramiento de la calidad del aire.
- Creación de hábitats para especies nativas.
- Creación de techos verdes.
- Desarrollo de sistemas de alimentos periurbanos.
El 5 % de los países que usan el Barómetro están restaurando este tipo de ecosistema en 189.525 hectáreas.
Beneficios para la biodiversidad
Creando impactos
Apoyo a los medios de subsistencia
Creando impactos
Mirando al futuro
¿Qué le depara el futuro al Barómetro de la Restauración?
Beneficios para la biodiversidad
Creando impactos
Los ecosistemas, especies y biodiversidad están profundamente interconectados. Cuando los ecosistemas sufre de degradación y destrucción, las especies suelen quedar en peligro, reduciendo su diversidad y debilitando todavía más a los ecosistemas. Sin una amplia gama de animales, plantas y microorganismos, el estado de los sistemas se deteriora.
Para atajar esto, el Barómetro de la Restauración hace seguimiento a los impactos sobre la biodiversidad a lo largo del tiempo, fomentado que los usuarios de la herramienta hagan informes a la Lista Roja de Especies Amenazadas TM de la UICN, Áreas Protegidas, Áreas Clave de Biodiversidad y más, enfocándose particularmente en las especies amenazadas.
Para hacer un seguimiento específico del impacto de la restauración en las especies de la Lista Roja, los países que utilizan el Barómetro de Restauración informan sobre la cantidad de hectáreas que tienen en restauración y que prevén que también ayudarán a proteger y mejorar el estado de las especies amenazadas. También se les anima a identificar especies concretas que se hayan beneficiado de los esfuerzos de restauración.
La Lista Roja de la UICN es la fuente de información más exhaustiva a nivel mundial acerca del riesgo de extinción de especies animales, vegetales y de hongos. Es un indicador clave del estado de salud de la biodiversidad a nivel mundial y brinda información clave que ayudará a tomar las decisiones de conservación necesarias.
Usa el mapa indicado a continuación para descubrir cómo la restauración ha ayudado a proteger a las especies en peligro de extinción.
Ghana
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
- Palisandro (madera tropical endémica de algunos países africanos)
- Talbotiella gentii (un árbol de bosque de tamaño mediano, endémico de Ghana)
- Afromosia (teca africana)
Ghana
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
- Palisandro (madera tropical endémica de algunos países africanos)
- Talbotiella gentii (un árbol de bosque de tamaño mediano, endémico de Ghana)
- Afromosia (teca africana)
México
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Dragoncito de la Sierra Madre Oriental Sur (Abronia gramínea)
• Mono aullador dorado (Alouatta palliata)
• Cocodrilo americano (Crocodylus acutus)
• Cascabel pigmea mexicana (Crotalus ravus)
• Perrito de la pradera mexicano (Cynomys mexicanus)
• Ocelote (Leopardus pardalis)
• Margay (Leopardus wiedii)
• Jaguar (Panthera onca)
México
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Dragoncito de la Sierra Madre Oriental Sur (Abronia gramínea)
• Mono aullador dorado (Alouatta palliata)
• Cocodrilo americano (Crocodylus acutus)
• Cascabel pigmea mexicana (Crotalus ravus)
• Perrito de la pradera mexicano (Cynomys mexicanus)
• Ocelote (Leopardus pardalis)
• Margay (Leopardus wiedii)
• Jaguar (Panthera onca)
Perú
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Algarrobo pálido (Algarrobo "Prosopis pallida")
• Caoba (Caoba "Swietenia macrophylla")
• Cedro americano (Cedro "Cedrella odorata")
Perú
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Algarrobo pálido (Algarrobo "Prosopis pallida")
• Caoba (Caoba "Swietenia macrophylla")
• Cedro americano (Cedro "Cedrella odorata")
Kazajstán
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Lince turquestaní (lince eurasiático endémico solamente de las cadenas montañosas de Asia Central)
• Leopardo de las nieves (félido endémico de las cadenas montañosas de Asia Central y del Sur)
• Oso pardo de los Himalayas (subespecie del oso pardo endémico de diversos países asiáticos)
Kazajstán
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Lince turquestaní (lince eurasiático endémico solamente de las cadenas montañosas de Asia Central)
• Leopardo de las nieves (félido endémico de las cadenas montañosas de Asia Central y del Sur)
• Oso pardo de los Himalayas (subespecie del oso pardo endémico de diversos países asiáticos)
Ruanda
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Cinamomo (Melia azedarach)
• Cerezo africano (Prunus Africana)
• Bayón (Osyris lanceolata)
• Pterygota (Pterygota macrocarpa)
Ruanda
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Cinamomo (Melia azedarach)
• Cerezo africano (Prunus Africana)
• Bayón (Osyris lanceolata)
• Pterygota (Pterygota macrocarpa)
Tayikistán
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Ciruela de Darvaz (Prunus darvasica Temberg)
• Marjor (Capra falconeri Wagner)
Tayikistán
Ejemplo de especies en la lista roja que se han protegido mediante la restauración:
• Ciruela de Darvaz (Prunus darvasica Temberg)
• Marjor (Capra falconeri Wagner)
The IUCN Red List
The IUCN Red List is the world’s most comprehensive information source on the global extinction risk status of animal, fungus and plant species. It is a critical indicator of the health of the world’s biodiversity and provides key information that will help inform necessary conservation decisions.
Apoyo a los medios de subsistencia
Creando impactos
Si bien la restauración de ecosistemas es uno de los puntos centrales de la restauración, la implicación humana es parte integral de muchos de los esfuerzos de restauración.
Esto implica que las personas y las comunidades experimentan beneficios adicionales que van más allá de los bienes y servicios para el ecosistema y la mejora de la biodiversidad. En muchos casos se crean empleos, lo que no solamente beneficia enormemente a las economías locales, sino que también puede llevar a mejoras en la educación y en el aprendizaje de nuevas habilidades a medida que la gente va aprendiendo nuevas maneras de generar ingresos.
Pero más allá de la creación de empleo, la restauración juega un papel fundamental en las iniciativas de recuperación sostenibles a gran escala. Esto incluye el mejoramiento de la seguridad alimentaria y diversidad de dieta, aumento de la disponibilidad de agua, suministro de energía para cocinar en forma de leña, y contribuir a un mejor estado de salud.
Medios de sustento creados mediante la restauración
El tipo de empleos creados por las iniciativas de recuperación varían según el proyecto o programa. Estos pueden incluir las iniciativas de recuperación, como la regeneración natural asistida por agricultores y el reemplazo de especies no nativas por otras que sí lo sean para incrementar la diversidad; los empleos relacionados con los objetivos más generales del proyecto, como la construcción de viviendas; y el ingreso generado por actividades económicas alternativas, como la venta de semillas.
Los empleos generados también varían en su duración: algunos son temporales o estacionales, mientras que otros son a tiempo completo y a largo plazo. Ambos son importantes para generar beneficios a la sociedad en general, pero estos últimos en particular representan una referencia de cómo los proyectos de restauración pueden contribuir a desarrollar empleos “verdes” y una economía más sostenible dentro de un país.
En Ruanda se han creado 827.940 mediante múltiples proyectos de restauración (para el año 2022). El proyecto de silvicultura sostenible Green Gicumbi, ubicado en el distrito de Gicumbi en la Provincia Norte de Ruanda, se enfoca en potenciar la resiliencia de comunidades vulnerables al cambio climático. Junto con la rehabilitación de bosques, los habitantes locales están construyendo casas resistentes a fenómenos meteorológicos, se están distribuyendo estufas para cocinar y se están estableciendo fuentes de ingreso alternativas en las comunidades.
Mientras tanto, en la República de Kirguistán, como parte de la campaña nacional para restauración y conservación de ecosistemas boscosos, los empleados del Ministerio de Agricultura y participantes de la asociación juvenil “Estudiantes por la Economía Verde” plantaron 1400 retoños de manzano en cinco hectáreas y 4400 retoños de coníferas en 6,5 hectáreas. Además del trabajo de plantación, los participantes en la campaña se benefician mediante el aprendizaje de destrezas adicionales y conocimientos de construcción de métodos de restauración y ecosistemas.
Job Creation
12,863,925 jobs created through restoration
-
10,620,148 jobs in Africa
-
43,983 jobs in Asia
-
2,199,794 jobs in Latin America
-
4,269,315 long term jobs
-
3,114,978 seasonal, casual or occasional jobs
-
4,487,269 short term jobs
-
992,363 other
Mirando al futuro
¿Qué le depara el futuro al Barómetro de la Restauración?
La restauración de ecosistemas es una parte clave de nuestro viaje hacia un clima seguro y a un futuro habitable. El Barómetro de la Restauración es una herramienta que permite a los países hacer seguimiento a los avances e inspirar acciones en sus viajes a la restauración. Al garantizar el establecimiento de los elementos básicos para una restauración exitosa, se pueden producir impactos enormemente beneficiosos para los ecosistemas, la biodiversidad y los medios de subsistencia.
En adelante, el sector privado también estará usando el Barómetro para ayudar a crear una imagen detallada de sus iniciativas de recuperación y sus compromisos, incluyendo cualquier beneficio derivado de la implementación. Esta herramienta puede facultarlos para demostrar tanto su compromiso con el fomento un cambio social y ambiental positivo, y rendir cuentas del mismo.
El Barómetro ayudará a los gobiernos, asociaciones y empresas a evaluar dónde y cómo se deben asignar sus recursos. También puede ayudar a identificar las políticas e incentivos necesarios para desbloquear las acciones de restauración transformativa.
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